Mi vida se ha destruido a pedazos desde que tengo memoria, toda cosa buena se pudre, todo anhelo se echa a perder, las personas que amaba morían en mis brazos y las veía transformarse en grandes monstruos sin ninguna posibilidad de volver a ser lo que fueron. También existe la gente que infecte con mis horrores, gente que solo recuerdo ya con la boca muda, y actitud fría.

Pocas personas han sido constantes y puedo poner mi destrozado cuerpo para protegerles de los terrores naturales y de los terrores del hombre. Sin embargo me veo forzado a no tenerles cerca siempre. Pero no es un sentimiento extraordinario.

Controlo todos mis instintos al grado de dolor, mi hambre se vuelve caótica por las noches... no puedo parar de sentir lo que este cuerpo grita agonizando. Recurro a revolcarme para bajar el dolor. He encontrado un par de personas que se han puesto de sacrificio ante mi, pero no entienden que alimentar mi instinto es convertirme en un monstruo sin retorno. Mis lagrimas les hacen pensar que me harán un bien, cuando lo único que resulta es destruir el último candado que me separa de ser un animal.

Soy un salvaje, buscando refugios. Un nómada, un vagabundo con la piel muerta. Mi cerebro y todo mi organismo no funcionan de manera adecuada. Se intensifico en cierta época esta condición, y me ha dejado caminado sobre un hilo. No puedo ya ni hablar, pero aun se escribir. Espero que el que encuentre esta nota, se cerciore de buscar a mi amada, y espero no haberla comido, no haberla matado, espero no haber destruido su vida. La ultima vez que le vi con vida estaba en las coordenadas 31°50'06.1"N 116°35'51.2"W... de cualquier modo creo que al encontrar esta nota ya no quedara rastro de quien era yo. Pero agradecería agradecería ... atendieras mi ultima petición...

Mi vida se ha destruido a pedazos desde que tengo memoria, como esta piel, como estos músculos, como estos huesos.

-nota de un no muerto-