Casarme contigo era mi cometido cuando era apenas un niño ... han pasado los años y mi fracturada mente cambio ciertos impulsos y deseos... compartir mi vida contigo es lo que se adapta a estos momentos, si tan solo pudiera abrazarte, si tan solo tuviera una oportunidad contigo. Si tan solo te enseñara el universo completo que existe en mi mente, y como has inter-actuado con cada una de las personas que les di vida en mi cabeza ... para los residentes de mi cabeza eres la señora de la casa, te respetan como si fueras la cosa mas pura del mundo. Son atributos que tomaron de mis sentimientos... no recalcaré mas ... no muero por el miedo a la soledad, muero cuando te tengo enfrente y no poder expresar todos esos bellos sentimientos ... pero vuelvo a caminar y se me pasa la intensidad, el corazón vuelve a bombear igual ... aunque fugaces los pequeños roces, son como energía sagrada ...

-diario de un viajero-