martes, 28 de marzo de 2017

Un vorágine agresivo me ahorca ... 
Un deslave violento me revuelca... 
Un incendio voraz me arde ... 

La misma puerta mágica que se abrió, se cierra por siempre. Ingenuidad al pensar que se puede entrar al mundo mágico en otra oportunidad. No hay forma de volver a Gioia ... una realidad paralela que existe entre esta realidad y lo que no se puede ver. El mundo de colores que los ojos no pueden ver aquí. Los olores que no entran en la realidad, los sabores, las texturas que no pueden tocarse, sensaciones únicas. Árboles que dan frutos eternos, mares con atardeceres mas bellos que la luz y el reflejo en el mar aquí en la realidad. Criaturas que ni la mente mas creativa puede construir. Y sin duda los templos mas ricos para el espíritu. 

También existen valles oscuros llenos de espinas, es parte de ese mundo. Y salir lastimado del bosque oscuro también es algo que no podré olvidar, es parte de la misma magia que entrego aquel lugar. Una aventura completa. Recuerdo cada pisada, cada movimiento en falso. Sus habitantes, algunos bravucones, otros dulce como la miel. Sus bellos animales, y toda la vegetación con hermosos frutos. 

Una vivencia única ... me arranca las emociones saber que no hay posibilidad de entrar. Siendo honestos la esperanza que dejamos aquel mundo y yo, solo fueron palabras para sobrellevar el camino que sigue. Gioia ya no necesita de mi. Tuvo lo que necesitaba, un héroe. Por eso al final su misma naturaleza fue orillándome a la puerta que me regresaría a la realidad. 

Aunque me hace pensar que tal vez se equivoco al darme paso aquella noche a ese mundo. Tal vez no cumplí realmente la función milagrosa que necesitaba, un humano como yo tal vez no era suficiente. Un contrato vencido tal vez por incumplimiento, pero recuerdo haber efectuado las tareas aunque con tropiezos. 

Me aterra pensar que alguien pueda ser mas valiente y heroico que yo. Que mis historias en piedra sean remplazadas. Supongo que será cuando aquel mundo necesite de otro héroe. Pues recuerdo en una selva de aquel lugar miré historias de antiguos héroes, todos consumidos por algún veneno al final, y el mundo mágico los escupió. Viví con miedo de ser desterrado ... y desde el principio iba envenenado, intentando no perder la cordura, pero Gioia con sus ramas, mares, senderos, también hacia arder mis extremidades. No puede culparme el místico lugar. También fui enfrentado por su misma naturaleza ... aunque desde luego habite para destruir algunas sombras que aterraban su corazón. 

Al final el espíritu de Gioia agradeció mi tiempo, agradeció las cosas que hice. Me pidió saliera y viviera una vida plena. Que cumpliera mis anhelos humanos. Mientras Gioia llovía, el espíritu mostraba angustia. Yo abrace su forma, y lloraba mientras me orillaba a la puerta sin retorno. Recuerdo el momento en que desapareció y regrese a la realidad. 

He despertado entre sueños, pensando que tal vez solo fue eso ... que la magia no existe. Que los reinos mágicos están solo en las obras de ficción y en la imaginación. Gioia esta en mi imaginación, Gioia esta en mi corazón ... Gioia me arranca el espíritu. 

Permite a tu héroe entrar, y morir ahí ... permite vivir eternamente, es mi deseo vivir hasta anciano en tus praderas. Gioia me has arrojado a un mundo que ya no recuerdo. Gioia hubieses envenenado mi ultimo trago en tu grandeza. Hubieses destruido mi amor por tus tierras, por tus mares, por tus paisajes, por tus templos ... por que pretendes vivir para siempre en una memoria. No soy fuerte al desprenderme, soy muy débil en estos momentos. Las fuerzas se han ido (aunque se que van a volver), no quiero noches arrastrados a una ventana esperando un milagro. No quiero mi mente divagar, pero extraño dormir en tu extensidad, meditar en tus templos, beber tus mares, comer tus manjares, y abrazar a tus habitantes. Besar tus suelos ... 

Hasta siempre Gioia ... deseo a mi dios te permita que la felicidad abunde en tu existencia. Deseo que si existen mas sombras, el próximo guerrero no logre llegar envenenado, sea mas hábil y audaz que yo. Deseo no maltrate tus suelos, tus mares, tus montañas, tus cielos ... Deseo pueda curar en ti lo que yo no pude curar. 

Hasta siempre mi bella experiencia ... mi dulce Gioia ... 


-diario de un aventurero-

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